Ultima vuelta

En la fórmula 1 son inminentes los cambios. Hay decenas de intentos de modificación en función de que la categoría más importante del mundo recupere el espectáculo y el interés que merece de parte del público. Pero otro tema que desvela a la organización es la seguridad de los pilotos.
 
El accidente que le costó la vida a Jules Bianchi en el Gran Premio de Japón 2014  volvió a encender la alarma de la protección de la cabeza, descubierta en todas las categorías de monopostos que giran a gran velocidad. Es por eso que la FIA no puede mirar más hacia el costado y comenzar a pensar en el cambio de las cabinas.
 
Por un lado, se pensó en cabinas semi cerradas, es decir con algún tipo de diseño que suponga una jaula protectora, y en otro caso, como el prototipo McLaren de la foto, una cabina completamente cerrada. En ambos casos siempre haciendo hincapié en la aerodinámica de los vehículos.
 
En este caso, el accidente de Bianchi no fue el único que despertó la idea. Hubo 2 casos, también fatales en monopostos que se cree fehacientemente que se hubieran evitado con un “cockpit” completamente cubierto: El de Justin Wilson en IndyCar y Henry Surtees en F2. En ambos casos, el lamentable final de los pilotos fue ocacionado por un objeto que impactó contra ellos.
 
Una importante decisión que la FIA deberá tomar, aunque al día de hoy todo es motivo de duda en la organización con respecto a las temporadas venideras.